Acabar la carrera no es motivo para dejar de estudiar. Actualmente el futuro laboral te pide que estés formándote continuamente. Una buena opción es hacer un máster.
Elegirlo no es una decisión fácil. Existe mucha variedad y la cantidad de dinero que tendrás que invertir seguro que es lo suficientemente alta para que medites bien la elección. Antes de decidirte, piensa en los siguientes puntos:
Temario: Es importante que estudies atentamente el contenido que ofrecen los diferentes masters. Debes valorar si realmente el programa te puede aportar conocimientos útiles en tu carrera profesional o que te interesen de manera especial.
Profesorado: Los profesores que imparten el máster deben ser especialistas en la materia o tener una importante experiencia profesional en el ámbito. Es muy positivo que sean personas reconocidas.
Prestigio: La realidad demuestra que un máster realizado en una escuela de prestigio tiene más valor que otro cualquiera. Hay empresas que directamente demandan personas que tengan máster cursados en determinados centros.
Horario: Dependiendo de tus posibilidades puedes optar por cursos full time o part time. Los primeros te ocuparán prácticamente todo el día ya que además de las clases se suelen pedir muchos trabajos en grupo que exigen dedicar más horas de las estrictamente lectivas.
Los de horario partido suelen ser bastante compatibles con la jornada laboral. En ocasiones se hacen uno o dos días a la semana.
Prácticas: Es un punto importante que el máster ofrezca un buen contacto con el mundo laboral, bien a través de prácticas o de una ofertas de trabajo. Además, también es adecuado que los temas que se impartan no sean demasiado teóricos y permitan comprender situaciones de la vida real.
Requisitos: Los requisitos que pida el máster te darán alguna pista sobre cómo van a ser tus futuros compañeros. Valora si prefieres hacer el máster con gente de tu nivel o si por el contrario, te conviene hacerlo con personas con más experiencia laboral, por ejemplo.
Precio: Infórmate de las diferentes vías que te ofrecen para pagar el máster. Piensa que es una cantidad considerable que posiblemente no puedas desembolsar de una vez. Asimismo analiza la relación calidad/horario/precio.
Finalmente, piensa en los objetivos que pretendes cumplir con el máster. Lo fundamental es que te permita completar tu formación y que te ayude a lograr un buen trabajo.